Los viñedos del Rhöne al norte de Lyon, se conocen con el nombre de Beaujolais, aunque este nombre se asocia, más que con una región, con el nuevo tinto ligero, aromatizado y muy coloreado del mismo nombre…
La vendimia en Beaujolais se realiza cada año en el mes de septiembre, justo en la época en que los valles se llenan del rocío otoñal, cuando el viento sopla suave, frío y fresco, llevando los aromas de flores perfumadas a cada región que recorre.
La fermentación de este vino se lleva a cabo a mediados de septiembre y principios de octubre en las tradicionales bodegas que año con año aguardan el momento justo para lanzar el vino francés más exitoso y con mayor presencia en el mundo.
El tercer jueves de noviembre el Beaujolais Noveau llega a tiendas y restaurantes en diversos países. Para ello más de 50 millones de botellas se distribuyen en Francia, Europa y el resto del mundo con el fin de que en la fecha acordada, todos puedan degustar este gran vino francés.
Este vino elaborado con la uva Gamay nació un 13 de noviembre de 1951 cuando se decidió bautizarlo con el nombre de la región, y se sabe que este vino es el único que la ley francesa permite comercializar en el mismo año de la cosecha, por tal motivo su descorche se ha convertido en un festejo mundial que se festeja anualmente el tercer jueves de noviembre.
El año pasado dio comienzo el miércoles 19 de noviembre a media noche en punto, cuando Georges Duboeuf (principal productor de la bebida) descorchó la primera botella, y con él miles de personas le dan comienzo al festejo del Beaujolais Nouveau.
El vino Beaujolais Noveau 2008 se puede tomar durante todo el 2009, cabe aclarar, que esta cosecha 2008 el vino es afrutado, de muy buen color púrpura con reflejos violetas y en boca tiene notas de especias, frutos rojos como la grosella y la fresa y negros como la mora.
La Vid del Beaujolais.
La vid de este joven vino es la uva Gamay Noir de mosto Blanco elaborada exclusivamente para vinos tintos de la región, no obstante, existe una pequeña franja plantada con Chardonnay que da vinos blancos Beaujolais. Pero el más popular y de mayor comercialización es el tinto.
Este tinto francés se puede distinguir por sus peculiares etiquetas con regularmente son coloridas y con cierto diseño artístico. No obstante existen diversas variantes del Beaujolais pero el que más destaca de todos es el producido por Georges Duboeuf.
Este vino se puede degustar con platillos tenues pues el maridaje debe de ser de complemento y no de contraste y la temperatura ideal debe de oscilar entre los 12 y 14°C.
Alejandro Carballo
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